La Compañía KORBO presenta un desfile maravilloso donde los elementos del mar, tierra, aire, y fuego se reúnen y se fusionan para formar una criatura híbrida tanto onírica como mitológica.
¡Oh! Cuántos marineros, cuántos capitanes, que zarparon, alegres, a expediciones lejanas, se han desvanecido en ese sombrío horizonte. ¡Cuántos han desaparecido, un destino sombrío y lamentable en un mar sin fondo, en una noche sin luna, bajo un océano ciego para siempre enterrados! …
Si antes de escribir esto para Océano Nox, Victor Hugo hubiera visto pasar por las calles del mundo EL CABALLO DE VAPOR, seguramente habría hecho otra descripción porque aquí ninguno ha desaparecido, no hay ningún destino sombrío y lamentable, sino todo lo contrario, es una navegación libre y potente en un océano de público.
Estáis todos invitados a ver el desfile: mirad pasar este barco que relincha, este caballo que hace resonar su cuerno de niebla para reunir y preparar un viaje fabuloso para aquellos que quisieran seguirlo.
Transportado por los vientos, conducido por Griegos, Romanos, Sajones, Bizantinos, Árabes y/o Egipcios, EL CABALLO DE VAPOR es una especie de galeón-caballo capaz de atravesar maravillosamente las aguas, para alcanzar tierras lejanas bordeadas de faros extraños.
Él es la fusión de un barco de vapor y de un gran caballo de madera mítico: un “Pegaso-Unicornio” articulado, a gran escala que puede navegar por tierra, mar y aire… Camina, navega y se cabrea desplegando sus alas desmesuradas.
Este fantástico animal es muy impresionante, y no solamente es debido a su fuerte existencia. De cerca, incluso muy cerca, su identidad se constituye de cada detalle cincelado.. Nada se ha dejado al azar: Las ventanas hechas de madera silvestre, nos recuerdan las aberturas encontradas en las torres de los galeones, las portillas de cobre erosionadas por el tiempo, los cascos encastrados, los arneses de cuero repujado, el caballito de mar esculpido, la barra de navegación y los mástiles completamente detallados y decorados, y así como sus brújulas derivadas de ciencias primitivas pero siendo totalmente originales…
Este caballo híbrido: -barco-pegaso-unicornio- despliega sus alas para utilizar sus prodigiosas capacidades de vuelo. Y esto es lo que sucede… o al menos esto es lo que pensamos que pasó, la posibilidad del imaginario supera la simple realidad. Es lo que mujeres, hombres y niños de diversos públicos se llevan consigo, de esta visión mitológica que deambula ante nuestros ojos.
Y cuando llega la noche, es también una procesión de luces que hace que el caballo-barco se convierta en un faro en la oscuridad para los ojos maravillados del público. Las lámparas de tormenta, linternas y faroles lo identifican en la noche apacible de los sueños más desenfrenados.
Está acompañado de una tripulación que arrastra y empuja. Es la energía humana, limpia, sin ninguna huella de carbono. Esta comunidad humana desfila dentro de la procesión, y propone un mundo onírico, cautivador y poético.
¿Quiénes son estos personajes a pie o sobre zancos guiando esta nave o más bien dejándose guiar por él? Marineros experimentados, jinetes quiméricos híbridos que representan múltiples culturas. Son dirigidos por un extraño capitán, una especie de Nemo, en lo más alto de su vigía, navegando en la superficie y en los aires. Son, todos, los acompañantes y los servidores celosos de la bestia mecánica y de su faro andante, centinela del mar. Están vestidos con trajes y tocados hechos enteramente a mano con las técnicas de artesanos populares de diferentes civilizaciones y tierras, que dominan perfectamente los materiales nobles.
Que esta odisea en movimiento perpetuo permanezca en vosotros durante mucho tiempo y os lleve a mundos míticos de deambulación donde la mayor libertad reine en su más grande expresión.
